Introducción
Estás leyendo esto mientras te sientas en la silla de tu escritorio y abres varias pestañas de tu navegador como todos los días. O me lees desde el asiento del autobús que tomas todos los días para ir a tu trabajo o formación. Tal vez estés empezando el día desayunando, un día que será un calco al anterior, y al de la semana pasada. ¿Te suena?
Todos hemos estado alguna vez inmersos en una rutina que no parece terminar nunca y de la que no estamos seguros de querer salir. Sin ir más lejos, hasta hace poco mi rutina consistía en perderme en el scroll infinito de LinkedIn mientras realizaba proyectos que, alguna que otra vez, se han quedado a mitad.
Los cambios no vienen solos, sino que hay que perseguirlos. La suerte no existe, pero sí la constancia, el interés y la motivación intrínseca, aquella que debería mover gran parte de nuestras acciones. En este post vengo a contarte cómo me vi inmersa en una zona de confort de la que tenía que escapar y como lo hice. Además, te doy 3 consejos para que tú también vuelvas a reconducir y enfocarte en aquello que verdaderamente quieres. ¡Así que, sigue leyendo!
✍️ Esta fue mi experiencia
La zona de confort me tenía atrapada sin yo saberlo.
En 2019 terminé el grado en Bellas Artes e inicié el máster en Diseño e Ilustración. Y el 13 de marzo del 2020 llegó el COVID. Desde entonces (y aunque pudiéramos pensar que no ha sido nada, nada monótono, dado que una pandemia y una situación así no se vive todos los días), inicié una rutina de estar en casa muchas más horas de las que me gustaría. Terminé el máster y las prácticas en casa, realicé la investigación para mi TFM estando hasta 2021 en remoto y realicé otro máster en 2022 que, aunque me hacía desplazarme para ir a clase, no era muy diferente a estar sola en casa en cuanto a motivación. En resumen, 3 años en una rutina que, si bien fue extraña al inicio, pronto fue mi zona de confort.
Lo peor era que esa misma zona de confort venía acompañada de una sensación de estar desubicada, de no tener foco, de no saber por donde empezar pese a que tenía muchas ganas de hacer cualquier cosa.
Hasta octubre de 2022, el momento donde empecé a plantearme nuevas posibilidades.
Desde octubre…
- Participé en un Hackathon,
- Conocí muchas empresas nuevas de gran interés como profesional,
- Contacté con recruiters y responsables de empresas,
- Descubrí como combinar mi formación creativa con áreas más tecnológicas, y…
- Empecé una formación en la EOI que me ha permitido asentar conocimientos en el ámbito de la IA, ciberseguridad, metodologías ágiles y que me ha descubierto que mi futuro va ligado al diseño de producto digital.
Desde entonces me zambullí de lleno en un proceso de transformación, de aprendizaje y de mucho trabajo. En cuanto empecé a moverme, gracias a ello o a las coincidencias, empecé a recibir algunos proyectos, a generar nuevas ideas y a comprender áreas de conocimiento (programación) a las que antes no quería ni acercarme. Y todo tenía la misma raíz: la motivación y la curiosidad.
📈 ✨ 3 consejos para que salgas hoy mismo de tu zona de confort
Muchos cambios y un gran esfuerzo, pero lo que más costó fue el inicio. Parece que no, pero tomar la decisión de cambiar es algo difícil y un camino lleno de dudas. Así que, si te sientes identificado con lo que acabas de leer, tengo tres consejos para ti.
- Muévete: Contactar con la gente que te interese, dinamizar tus redes, hablar por LinkedIn, divulgar… ¡Funciona! Yo era completamente escéptica con ello, pero cuando empiezas a ver los resultados te da un chute de energía.
- Pon en orden tu presencia online: ¿Una web desactualizada? ¿Unas redes sociales hechas, una mezcla de cosas que ya no te interesan? Cambia una tarde de scroll infinito por unas horas de limpieza y orden digital. Cambiará la inspiración que recibes a diario y te asegurarás de que quienes te deben de ver captan bien el mensaje.
- Ten motivación: Reflexiona, identifica aquello que realmente te apetece hacer y ves a por ello. Todas las personas tenemos intereses diversos y capacidad para desarrollarnos en el campo que nosotros escojamos. Nada es imposible si estás lo suficientemente motivado como para salir de tu zona de confort.
Pocos días antes de escribir este artículo se cruzó en mi camino un reportaje que, casi de manera premonitoria, anunciaba aquello de lo que hablo ahora. Sara García-Alonso, recientemente seleccionada como astronauta por la Agencia Espacial Europea, hablaba de su trayectoria y sus metas, mencionando una frase que causó en mí un gran impacto: Según ella, sus motivaciones eran «la curiosidad extrema, las ganas de explorar y las ganas de contribuir a la sociedad».
Desde que era pequeña decidí que mi camino estaba en las artes, en el dibujo y la pintura. Pero hace pocos años descubrí algo que me hizo cambiar el rumbo y centrarme en el poder del diseño como herramienta para comunicar y solucionar problemas. Esa necesidad de ayudar, de potenciar el cambio, ha saltado en mi mente de nuevo tras escuchar a Sara mencionar que la curiosidad, la exploración y las ganas de aportar a la sociedad fueron los tres factores que, desde pequeña, la hicieron avanzar hacia su objetivo.
Por ello, te animo a que rompas esa barrera y esa rutina en la que estás inmerso y escales hasta la zona de aprendizaje. No hablo de grandes cambios: puedes empezar por recorrer nuevas zonas de tu ciudad para inspirarte o leer nuevos libros o referencias online. También te recomiendo empezar a estudiar algo nuevo, o divulgar sobre ello (¡confía en ti, porque tienes la capacidad para mostrar al mundo eso que sabes!). Cualquier cambio es bueno para que salgas de la zona de confort y te des la oportunidad de crecer y aprender algo nuevo.
Y recuerda: “el primer paso es la mitad del camino”
Agradecimientos
Un artículo enmarcado en el proyecto de Post it Power, el grupo de 9 jóvenes surgido de la Aceleradora de talento digital de Escuela de Organizacion Industrial y Valencia Activa. De la mano con Irene Trenco, Elena Roig, Amalia Olivo, Alba Hurtado, Judith Vivó, Mariia Shyrobokova, Rocio Merino, Neus Martínez.
Mentorizadas por Ana Carrau, Naiara Pereyra, Patricia Cima, Olga Carbonell, Tamara Carrillo, Carolina Sanz, Mercedes Sanchis, Carla Castello y María José Ramón.